Fatiga en la Conducción
Si se buscara la palabra en el diccionario, se encontraría literalmente cansancio, ahora bien, lo que trataremos de explicar son los motivos de la fatiga. Existen varios de ellos entre otros los principales y más comunes son:
–La falta de descanso
-Los malos hábitos de alimentación
-Falta de hidratación
Básicamente todos estos motivos desencadenan en el sueño, si lo aplicamos a la conducción rápidamente nos daremos cuenta que dormir y manejar no se llevan de la mano. El sueño al volante es un riesgo real, aproximadamente casi 3 de cada 10 accidentes de tránsito, por lo general en rutas, se deben a la somnolencia al volante. Lo más importante es que seamos conscientes de este riesgo y no lo ignoremos, porque el sueño siempre nos termina venciendo y sin darnos cuenta pasamos de tener sueño a quedarnos dormidos, aunque sea un par de segundos, suficiente para tener un accidente, estos segundos son muy importantes ya que a 120 km/h recorremos 33 mts en un segundo, mucho no? , muchas veces hacemos un esfuerzo sobre humano por no cerrar los ojos y sin embargo nos dormimos, si con los ojos abiertos!! esta acción inconsciente se llama micro sueño
La recomendación más importante que deberíamos tener presente como conductores, y aunque que resulte obvia, es que debemos ser conscientes en cada momento de nuestra capacidad para conducir. Como con otros factores, si notamos que en ese momento no estamos en buenas condiciones para conducir, lo mejor sería no hacerlo.
El descanso:
Deberíamos dormir bien cada noche, el tiempo que se necesite para descansar correctamente y no sentir sueño en ningún momento al día siguiente, en general lo normal sería entre siete y ocho horas. Si al día siguiente tenemos que hacer un viaje largo, este consejo es todavía más importante. Cada persona tiene sus ciclos circadianos, o sea, su propio reloj biológico interno y lo más importante es no cambiarlo mientras se realiza un viaje, así si decidimos manejar cuando nuestro ciclo nos está indicando que deberíamos dormir seguramente comenzaremos a sentir los efectos de algo que irremediablemente sucederá tendremos ganas de dormir.
Descansar cada cierto tiempo, todos los conductores se cansan al conducir, aunque estemos sentados y cómodos en nuestras mullidas butacas, deberíamos parar cada dos horas o 200 km, detener el coche, bajarnos, estirar las piernas, dar un pequeño paseo y beber algo. Así se rompe la rutina y monotonía que supone conducir por algunas rutas. Se ha comprobado que la capacidad de reacción de un conductor disminuye casi a la mitad después de conducir más de cuatro horas seguidas.
Hábitos de alimentación:
También es importante en un viaje no excedernos en la comidas, el motivo es, porque nuestro sistema digestivo luego de una buena comilona, va destinar a esa tarea gran parte del torrente sanguíneo relegando otras funciones, es en ese momento en que nos sentimos con la famosa modorra luego de comer demasiado, ya que la sangre no está destinada a nuestro cerebro como tarea primordial, indicándonos entonces que deberíamos descansar, por consiguiente hay que evitar comidas, pesadas y grasas, llenarnos hasta reventar. Evitar comidas de difícil digestión, como las carnes, harán que nuestro cuerpo se adormezca. Para conducir después de comer mejor optar por una comida ligera y sin Alcohol.
Hidratación:
Hay que hidratarnos con frecuencia. Podemos llevar una botella con agua dentro del coche y vamos bebiendo de vez en cuando, aunque no paremos. Nos mantendrá hidratados.
Conviene tomar bebidas con cafeína, como refrescos de cola o café?, Depende, la cafeína es una sustancia excitante que efectivamente tiene como efecto el reanimarnos y desperezarnos, sin embargo no hay que confiarse demasiado de ella, pues su efecto se acabará de golpe sin avisar y entonces nos puede sobrevenir el sueño cuando nos habíamos confiado pensando que ya nos habíamos despertado. Lo mejor es el AGUA en especial los días de calor ya que en esos días perdemos gran cantidad de líquidos y facilitan el cansancio.
Otro factor importante es la ventilación, debemos ventilar bien el interior del coche, pues en un habitáculo poco ventilado se va viciando el aire, es decir, disminuye la cantidad de oxígeno y aumenta la cantidad de dióxido de carbono, fruto de la respiración, y eso hará que nos adormezcamos. Llevar una temperatura cómoda, ni con mucho frío ni con mucho calor, también es adecuado, mejor con un poco de fresco.
En síntesis:
No nos confiemos. En cuanto notemos los primeros síntomas de sueño, como que los ojos nos pican y nos los frotamos, que parpadeamos más de lo normal, que nos cuesta trabajo mantener los ojos abiertos, que nos sentimos cansados, que necesitamos cambiar de postura, que bostezamos varias veces, que comenzamos a soñar despiertos, debemos actuar ya, y lo mejor es parar. El mejor remedio para el sueño es DORMIR no hay otra opción.
El sueño tiene todos el talonario para ganarnos. Podemos bajar la ventanilla para que entre fresco, podemos subir el volumen de la música, podemos masticar un chicle, podemos agitarnos, pellizcarnos mil trucos, pero nada servirá realmente, pues el sueño y el cansancio seguirá estando ahí, y podremos tener un accidente. Nada justifica arriesgarse a esto por el solo hecho de no detenernos en un lugar seguro y descansar por lo menos 15 o 20 minutos a reponer energías que tanto pide nuestro cuerpo y se lo negamos, tan solo por la necedad de no reconocer que estamos cansados.
Hola, muy buena noticia.